Cristo de Buga

El Señor de los Milagros de Buga es una imagen ubicada en Colombia en la Basílica Menor del Señor de los Milagros de Buga. El Señor de los Milagros de Buga, es una imagen tallada en madera y con una altura de 1.33 metros, que se encuentra entronizada en el Camarín de la Basílica Menor del Señor de los Milagros de Buga, localizada en el departamento del Valle del Cauca, Colombia.

La tradición cuenta que una indígena estaba lavando la ropa en el río Guadalajara para poder comprar una nueva imagen de Jesucristo con los jornales. Un día, al ver que un vecino iba a la cárcel por una deuda que no había podido pagar, decidió cubrir la deuda del hombre para que lo dejaran en libertad. En otra ocasión, en el río que la indígena visitaba haciendo su labor, vio un objeto brillante que bajaba por el río. Era un crucifijo que llevó a su casa y puso en medio de las aguas en un altar. Al día siguiente, cuando se despertó, describió que la efigie había aumentado hasta llegar al tamaño actual (1,3 m sin cruz).

La escultura de color oscuro representa a Cristo ya muerto con el cuerpo muy inclinado, la cabellera empapada de sangre y los labios entreabiertos. Esta imagen empezó a conocerse como “Señor de los Milagros” a raíz de los muchos testigos, que bajo gravedad de juramento, hicieron declaraciones sobre hechos sorprendentes, especialmente curaciones realizadas por la devoción al Santo Cristo. La historia nos dice… Por orden de la Curia diocesana en el momento situada en Popayán, se ordenó la destrucción de la imagen, pues ésta presentaba muchos deterioros ocasionados por las manos imprudentes de las gentes que le arrancaban pedazos a la misma. Así lo atestiguó bajo fe de juramento ante otro visitador, en 1665, doña Luisa de la Espada, hija de uno de los patriarcas de Buga. Ella aseguró que la imagen, arrojada al fuego, no se quemó, antes bien sudaba y la gente empapaba algodones en el sudor. Este testimonio se conserva. Algunos presentes aseguraron que ese algodón impregnado logró sanar sus males, y de inmediato el Cristo fue bajado del fuego. En 1884, cuando los misioneros Redentoristas llegaron a Buga para hacerse cargo de la Ermita y del culto que allí se celebraba, la historia sobre el hallazgo en las aguas del río Guadalajara de la imagen del Cristo era bien conocida entre los locales. Los misioneros construyeron una nueva Ermita (de la cual se conserva la Torre de Campanas) para alojarlo, pues un terremoto ocurrido el día 9 de julio de 1766, destruyó la anterior. Finalmente, la imagen fue llevada al actual templo, donde hoy en día se exhibe en la Basílica Menor del Señor de los Milagros de Buga. La primera piedra de la construcción del actual templo se colocó por allá en 1892 y fue bendecida por el arzobispo de Popayán de esa época y con la presencia de Rafael Núñez, entonces Presidente de la República de Colombia. El templo fue inaugurado el 2 de agosto de 1907, y desde esa época permanece allí el Señor de los Milagros de Buga.